Desde la insonoridad de las palabras,
amuralladas tras el desafío de las mentes
por contener el batallar de las pieles,
sofocar aromas,
impedir el impulso de las manos
que rechazadas vuelven
y quedan ahí, sobre la nada,
estáticas, confusas,
acariciando un vacío tenebroso,
donde las presencias mudas
son sólo fantasmas antes los ojos.
Desde ese oscuro hueco,
paridor de silencios,
junto mis manos en plegarias
por develar el misterio
que une destinos de amores inciertos.
Lucy Iaq
domingo, 28 de junio de 2009
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Son las improntas de los amores inciertos, caricias truncas,besos al vacio,miradas sin destinos,´lagrimas acumuladas en el vártice de las pupilas
ResponderEliminarAmores inciertos...es tan difícil determinarlos.
ResponderEliminarNos engañamos a veces, pero éso no nos impide, a los poetas, continuar soñando con el verdadero amor.
Gracias Juan.
Un abrazo.
Lucía